EEUU pide a América Latina más presión para doblegar a Maduro

El vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, ha vuelto a reclamar que los países del continente aumenten la presión contra el Gobierno de Nicolás Maduro y avancen en el proceso de suspensión de Venezuela en la Organización de los Estados Americanos (OEA).

“(Les pedí) que tomen tres acciones concretas: que prohíban a los líderes corruptos de Venezuela lavar dinero a través de sus sistemas financieros, a emitir restricciones en visas para obstruir el paso de sus líderes corruptos, y a defender la democracia al iniciar el proceso para suspender a Venezuela” de la OEA, ha indicado Pence este jueves en un artículo de opinión publicado en la sección “Tribuna Abierta” de Efe News.

Ahonda de este modo en el discurso que pronunció el pasado lunes en la sede de la OEA, en

el que además tachó de ‘fraude’ y ‘estafa’ las elecciones que Venezuela celebrará el próximo 20 de mayo y llamó a suspenderlas. Unas amenazas que fueron rechazadas por la Cancillería venezolana y el propio presidente Maduro, que reafirmó su decisión de abandonar ese organismo, el cual, asegura, busca desestabilizar e injerir en sus asuntos internos.

Pence, no obstante, ha insistido en que todos los países de la región deben hacer más para “apoyar” al pueblo venezolano y hacerles frente a sus “opresores” —refiriéndose a las autoridades venezolanas— para que los ciudadanos “recuperen su libertad”. 

Recalca, además, que Washington no reconocerá los resultados de las elecciones venezolanas, por lo que advierte al mandatario venezolano que debe suspender el “simulacro de votación”.

Tanto Maduro como el Consejo Nacional Electoral (CNE) han ratificado garantías para la campaña electoral y han pedido a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Unión Europea (UE) que envíen observadores para que den fe de la transparencia de los comicios.

Estados Unidos, que abiertamente dice que ha llegado el momento de que ‘Maduro se vaya’, al igual que otros líderes socialista de la región, advierte de que los comicios presidenciales, boicoteados por fuerzas de la oposición, carecen de toda legitimidad por la falta de garantías en el proceso electoral.

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