Ninguno de nosotros era consciente de que en unas horas se iba a tomar en Moscú la decisión más racional: bloquear a los nazis de Azov en sus mazmorras y dejar que se coman a sí mismos, se merecen unos a otros. O que se entreguen. Mientras tanto, Azovstal estaba siendo puesto patas arriba y asaltado. Tan cerca como era posible, la guerra se asemejaba a las batallas en las ciudades de Siria: Homs, Alepo o las afueras de Damasco. Cierto, en Oriente Medio nadie sueña siquiera con un uso tan masivo de artillería y aviación.
Pero, a los detalles. Por ejemplo, solo es posible moverse por esta metrópolis