Sorprendido por los últimos avances balísticos de Pyongyang, EE.UU. acelera preparativos de defensa destinados a neutralizar una hipotética agresión norcoreana.
Mientras el estado insular occidental de Hawái se prepara para resistir un posible ataque, la Guardia Costera estadounidense ha anunciado hoy domingo la prueba de un sistema de defensa antimisiles el próximo fin de semana.
El arma se probará en la alasqueña isla de Kodiak, en el Complejo Espacioportuario del Pacífico-Alaska, según el comunicado emitido por el mencionado organismo militar, que
ordena a los marinos de la zona que en esos días se mantengan alejados de las aguas comprendidas entre la isla y el estado de Hawái, a unos 4000 km de distancia.
En el complejo hay ya de hecho estacionado un contingente militar, ocupado en pruebas del sistema de Defensa Terminal a Gran Altitud (THAAD, por sus siglas en inglés), como se reveló en los días siguientes a la prueba misilística norcoreana del 4 de julio.
Ese día, coincidiendo con la fiesta nacional estadounidense, Pyongyang hizo un nuevo lanzamiento de prueba de un tipo de misil que a continuación el Departamento de Defensa de EE.UU. (el Pentágono) reconoció “no haber visto nunca antes”.
En el marco de esas pruebas del THAAD en Kodiak, la Agencia de Defensa de Misiles estadounidense afirma haber “validado la capacidad del sistema para interceptar misiles balísticos de alcance intermedio”, según un anuncio del director de relaciones públicas de la agencia, Christopher Johnson, citado este domingo por la cadena televisiva ABC News.
El THAAD ha sido desplegado ya en la isla de Guam (en el Pacífico occidental) y en Corea del Sur, según Washington para contrarrestar un posible ataque de Corea del Norte, si bien China y Rusia han manifestado su “oposición categórica” al despliegue del sistema, que consideran una “amenaza grave”.
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