Rusia pone en estado de alerta elevada sus sistemas de defensa aérea en el extremo oriente del país ante la escalada de tensión en la península de Corea.
El Ejército de Rusia ha reforzado sus sistemas de defensa aérea en el lejano oriente del país y los ha puesto en un estado de alerta elevada, en momentos en que la escalada de tensión entre Pyongyang y Washington ha llevado a la península coreana al borde de una guerra nuclear.
“Lo que está ocurriendo actualmente alrededor de Corea del Norte no puede sino ser motivo
de nuestra preocupación y comprensión de la necesidad de tomar medidas adicionales para proteger nuestro territorio. La defensa aérea y las Fuerzas Aeroespaciales han sido reforzadas en la región rusa de Extremo Oriente”, ha afirmado este viernes Victor Ozerov, exjefe del comité de Defensa y Seguridad de la Cámara Alta rusa, en una entrevista con el medio local Sputnik.
Tras asegurar que el país euroasiático vigila todos los movimientos que se producen en la zona, Ozerov asegura en la conversación que los puntos desde los que Corea del Norte podría lanzar misiles son monitoreados con “mayor atención”.
Estas medidas disuasivas por parte de Rusia, que comparte una frontera de 17 kilómetros con Corea del Norte, parecen más que necesarias en este momento crucial de amenazas mutuas entre Washington y Pyongyang, que durante los últimos días “han pasado de lo normal”.
El martes, el presidente de EE.UU., Donald Trump, amenazó a Corea del Norte con que, de seguir su camino, “se enfrentará a un fuego y una furia como el mundo no ha visto nunca”, advertencia que después describió como “no lo suficientemente dura”, para este viernes volver a amenazar al líder norcoreano, Kim Jong-un, con planes militares que tiene listos para entrar en acción.
En respuesta a tales amenazas, Corea del Norte ha anunciado estar planteándose la posibilidad de utilizar misiles balísticos de medio alcance para atacar las inmediaciones de las bases militares estadounidenses de la isla de Guam, si Washington lleva a cabo alguna nueva provocación.
La advertencia del “fuego y la furia” de Trump ha levantado críticas en Washington, donde el senador republicano John McCain ha criticado la actitud del presidente, pidiéndole que no lance amenazas si no está "listo para actuar".
El senador demócrata Bernie Sanders ha advertido a su vez de que la ‘retórica incendiaria’ de Trump podría desatar una guerra nuclear que dejaría millones de muertos.
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Hispantv
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