La Cancillería rusa indica que sanciones de EE.UU. bloquean actividades económicas de Venezuela y condenan a ese pueblo, desprovisto de medicinas contra COVID-19.
“Es necesario que Washington abandone por completo su política de medidas prohibitivas unilaterales para bloquear la actividad económica extranjera de Caracas y permita que el Gobierno venezolano adquiera libremente medicamentos y bienes esenciales”, ha enfatizado este jueves el portavoz adjunto del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso, Alexéi Záitsev.
En una rueda de prensa, el diplomático ruso ha recalcado que solo tras el levantamiento de las sanciones, el pueblo venezolano podrá hacer frente a la pandemia del nuevo coronavirus,
causante de la COVID-19.
Záitsev ha rechazado también que los activos de Venezuela en el exterior, que se ha conseguido desbloquear, sean presentados por los medios de comunicación como un logro del líder opositor venezolano, Juan Guaidó.
“Los medios presentan el desbloqueo de activos en las cuentas del Gobierno venezolano como mérito del diputado Juan Guaidó. Son cínicos sus intentos de ganar puntos políticos aprovechando los sufrimientos del pueblo venezolano, dado que él mismo aplaudió las sanciones arbitrarias”, ha ironizado el vocero ruso.
El Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, intenta aumentar la presión contra la nación latinoamericana. Washington impuso el martes nuevas sanciones a exfuncionarios del sector eléctrico de Venezuela, y a otros empresarios por brindar apoyo financiero a Caracas.
A finales de julio, el director del Departamento para América Latina del Ministerio de Exteriores de Rusia, Alexander Shchetinin, destacó que, en lugar de aumentar la asistencia a Venezuela en su lucha contra la crisis sanitaria, como Washington urge, “el paso más importante” para ayudar a ese país sudamericano sería el levantamiento de los embargos norteamericanos.
Además, Estados Unidos trata de impedir que otros países ayuden a Venezuela. Con fecha anterior, las autoridades estadounidenses buscaron detener las entregas de combustible iraní a Caracas, y extendieron las medidas coercitivas contra el gigante estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA).
El Gobierno venezolano ha condenado en diferentes ocasiones las medidas coercitivas de Washington, afirmando que estas son parte de una agresión criminal.
Asimismo, Caracas ha aseverado que denunciará ante la Corte Penal Internacional (CPI) las nuevas amenazas de EE.UU. relativas a la imposición de más restricciones por la venta del petróleo venezolano.
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Hispantv
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