La situación a lo largo de la línea de contacto en Donbass se está calentando. Las Fuerzas Armadas de Ucrania no dudan en usar armamento prohibido según los acuerdos de Minsk. Corresponsales de la Agencia de Noticias de Járkov nos dirigimos al oeste de la República Popular de Donetsk para observar de primera mano la situación en el frente.
Llegamos a la ciudad de Dokuchaevsk, en la línea del frente. Solo con ver los sacos de arena a las puertas de las tiendas se sabe que es una ciudad militar. Las ventanas están cerradas con vigas de madera, porque volver a instalar cristales sería un acto inútil. En cualquier momento, una bomba acabaría otra vez con el cristal repuesto. Por las calles caminan los
civiles y niños que vuelven a casa después del colegio. Si no fuera porque toda la ciudad se encuentra a tiro del Ejército Ucraniano, Dokuchaevsk podría parecer una habitual pequeña localidad de provincias.
“Hoy ha habido bombardeos. Un civil ha resultado herido. Se encuentra en el hospital. El Ejército Ucraniano ha utilizado vehículos de infantería. En Frunze han caído varias bombas. No hay gas”, explica un soldado del ejército de la RPD apodado Kipish.
Según Kipish, el Ejército Ucraniano bombardeó Dokuchaevsk y las localidades de alrededor a pleno día. Hasta ahora, eso ocurría en raras ocasiones.
“No han disparado contra nuestras posiciones. Lo han hecho conscientemente, sabían que las bombas caían en zonas residenciales. Así quieren poner a los civiles contra los soldados”, explica.
También sufren gravemente a causa de los ataques indiscriminados de la infantería y la artillería ucraniana los civiles de la localidad de Yasnoe. Muchas de las viviendas muestran restos de impactos directos de las bombas y los fragmentos de metal que han agujereado las paredes de cemento.
Nos encontramos a quinientos metros de las posiciones ucranianas. Las trincheras están situadas en la zona de la localidad de Yasnoe, muy cerca de Dokuchaevsk. Nos quedamos en un bien equipado puesto de tiro y conocemos a Max, un miembro del ejército de la RPD que cuenta que el Ejército Ucraniano se ha acercado tanto a las posiciones de las milicias que ahora incluso las balas de las ametralladoras vuelan sobre su cabeza.
“Han aparecido muchas ametralladoras pesadas. Habitualmente utilizan infantería. Además de fuego de mortero”, explica Max. El soldado apunta también que, gracias a la labor de inteligencia, las fuerzas armadas de la República Popular de Donetsk han registrado los intentos de grupos de sabotaje ucranianos de infiltrarse entre las unidades de la RPD.
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